A petición de Ant tralala tralala les voy a contar el cuento del dibujo que sigue en mi blog.
Se titula Almarina y la lámpara Maravillosa.
Almarina era una joven sirenita que vivá en un mar cualquiera.
Por supuesto que uno de los cuentos favoritos de Almarina era "Aladino y la lámpara maravillosa".
Por supuesto que Almarina deseaba, como muchos de nosotros, encontrarse una lámpara maravillosa con un genio en su interior que le resolviera todos sus problemas e hiciera realidad todos sus deseos.
Y un día paseando por el fondo del mar la vió, era una lámpara de metal, un poco oxidada, con un diseño muy original pues el frente era la parte delantera de un
pez.
Almarina emocionada tomó la lampara, encontró lo que parecía la panza del pez y la frotó efusivamente.
Y mágicamente de la boca del pez empezó a salir una corriente de agua extraña y muchas burbujas.
¡Seguramente es el genio!- pensó Almarina
Poco a poco la panza del pez se empezó a hacer más pequeña y de repente la lámpara se rompío en dos pedazos: Una lata metálica y un pececillo de colores.
¡Me has salvado!- dijo el pez- no encontraba que comer y entré a este objeto donde comí unos residuos de comida, pero estaban tan contaminados que mi panza se inflamó y al tratar de salir quedé atorado en el objeto metálico.
"Eso es una lata con desperdicios que algun ser humano tiró al agua"- le aclaró Almarina
¡Cuando tu frotaste mi panza!-continuó el pez- vomité todo lo que me había hecho daño
y por fín pude liberarme de la lata, pero tendré que cuidarme más de la contaminación de las aguas.
Almarina se alegró de su buena obra, se limpió como pudo con agua contaminada, del vómito del pez y decidió ponerse a trabajar en lugar de buscar lámparas maravillosas.
La moraleja es:
niños y padres:!Ya no contaminen el medio ambiente"
Y recuerda: si está obscuro; ¡Ilumínate"